D’Elía, internado

El dirigente social Luis D’Elía fue trasladado este viernes de urgencia al Sanatorio Anchorena tras presentar un cuadro de fiebre y malestar general. En este marco, la Cámara Federal de Casación penal admitió un planteo de su defensa, que solicitó la prisión domiciliaria por los problemas de salud del exsecretario de Tierra y Vivienda.

En la resolución de los jueces Mariano Borinsky, Daniel Petrone y Juan Carlos Gemignani se tuvieron en cuenta los distintos informes médicos obrantes en la causa que advierten sobre el complicado estado de salud que presenta D’Elia.

En el fallo de 14 páginas al que tuvo acceso Télam se señaló, además, que D’Elia es un paciente coronario, diabético, revascularizado, con isquemia perinecrosis, que requiere tratamiento antiisquémico completo, actividad física programada y control de stress físicos y psíquicos.

Más temprano, en diálogo con el programa #LaMañana con Víctor Hugo que se emite en la AM750, el dirigente dijo que su condena «es a muerte» y sostuvo que la causa en su contra «es una arbitrariedad por donde se la mire». «Uno ve la actuación de la justicia federal y realmente es lamentable. La negligencia lleva a que hoy no se que va a pasar conmigo. Veo mucha maldad y mucho odio en todo esto», añadió.

Cabe recordar que D’Elia se encuentra detenido en el penal de Ezeiza tras haber sido condenado a 3 años y 9 meses de prisión por la toma de una comisaría en el barrio porteño de La Boca en 2004, e integra el listado de presos que conforman la población de riesgo en relación al avance del coronavirus, confeccionado por el Servicio Penitenciario Federal.

Los jueces sostuvieron que el complicado estado de salud de D’Elía, sumado a que tiene 63 años, lo coloca en una situación de suma vulnerabilidad frente al Covid-19; aunque resaltaron que la propagación del coronavirus a los actuales niveles y su estado de pandemia, resultaron posteriores a la resolución que había denegado en primera instancia su arresto domiciliario.

En el voto que marcó la dirección del fallo, el juez Borinsky resaltó que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos recientemente surgió a los Estados a reducir la sobrepoblación en los centros de detención como una medida de contención de la pandemia, en función de las alarmantes condiciones en las que se encuentra la población carcelaria en la región y el mayor riesgo que eso genera en este contexto, particularmente en personas mayores, diabéticas y con afecciones cardíacas como en el caso D’Elia.