La ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, expresó esta mañana en la AM750 su indignación respecto del brutal femicidio de la joven Úrsula Bahillo: «estamos conmovidas, estamos indignadas. Tenemos una víctima, una joven, donde sí había denuncia respecto de un agresor que era miembro de una fuerza de seguridad, que tenía licencia psiquiátrica. Pareciera que para los poderes judiciales, para la policía esto no es un tema prioritario, un tema que está demostrando un riesgo respecto de la vida de una joven».
Úrsula Bahillo tenía 18 años y vivía en localidad bonaerense de Rojas. Es víctima de Matías Ezequiel Martínez, policía bonaerense que la mató a puñaladas. La joven había denunciado al femicida por violencia de género ante la Comisaría de la Mujer, este la tenía amenazada de muerte y tenía una perimetral. En este sentido se refirió Gómez Alcorta: «si se incumple una perimetral, eso es un delito, el poder judicial no intervino». Y cuestionó: «¿Qué tenemos que hacer? Ser implacables con cada funcionario y funcionaria que intervine en cada uno de estos hechos y que no lo ponen como un problema de primer orden en un sistema federal».
En la madrugada del martes, familiares y amigxs de la víctima convocaron a una pueblada frente a la comisaría de Rojas para exigir justicia. Las fuerzas de seguridad respondieron con una fuerte represión con gases lacrimógenos y balas de goma. Eran las mismas fuerzas de seguridad las que encubrían lo sucedido. Gómez Alcorta subrayó su indignación: «la amiga de Úrsula gritándole a la policía y le disparan con una bala de goma en la cara. Esa imagen condensa el lugar que tiene nuestra voz de indignación de reclamo ‘ni una menos’ ‘nunca más’ y la respuesta del Estado es la indiferencia, el ninguneo y la reproducción de la violencia».