A través de una carta firmada por el jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, Gerardo Milman, el Gobierno autorizó la protesta contra la cumbre del Grupo de los 20. «Entiendo que de esta manera todos hacemos un aporte a la paz y la convivencia democrática», afirmó el funcionario en una misiva dirigida al titular de la SERPAJ, Adolfo Pérez Esquivel.
«Por instrucción de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y en el marco de la necesidad de diálogo entre los argentinos que ha propuesto el presidente Mauricio Macri, se ha dispuesto dar respuesta satisfactoria a vuestra solicitud de manifestarse por los derechos que les asisten durante el día 30 del corriente», inicia el escrito.
Asimismo, desde la Casa Rosada advirtieron que sólo se permitirá «toda señal de manifestación en paz, sin caras tapadas, sin elementos o artefactos que tengan por objeto la violencia», al tiempo que requirió que se contemple «la posibilidad de aislar entre todos si los hubiere, a individuos o grupos violentos es bienvenida para la generación de un clima de expresión plural y democrática».
«Sin que esto signifique que de ningún modo el Estado resigna la responsabilidad de la Seguridad es en tal sentido que es preciso transmitirles que en cualquier caso qué haya situaciones que pongan en riesgo la seguridad de las personas, los bienes públicos y/o privados las fuerzas de seguridad actuarán de manera inmediata de acuerdo a la Constitución y las Leyes», sostuvieron en la carta desde Ministerio de Seguridad.
Por su parte, el premio Nóbel de la Paz respondió que no tiene responsabilidad alguna en los controles de Seguridad porque «es el Estado el que debe ser garante de la seguridad ciudadana». «Yo no puedo ser garante y menos de un gobierno que reprime en la forma que reprime», comentó en declaraciones a la radio FutuRock.
